En este desafío aprenderemos a reforzar la confianza en nosotros mismos y a enfrentarnos a situaciones inesperadas a las que responderemos de manera espontánea e intuitiva superando dificultades para avanzar hacia una meta.
Analizar situaciones cotidianas con un enfoque proactivo.
Punto de partida: Piensa en una situación clave, en la que te enfrentes a un problema inusual y en la que no puedas asistir al consejo o a la instrucción de otra persona de mayor categoría o conocimientos que tú. Debe ser un obstáculo que requiere de desempeño en algún sentido (no la inacción) para evitar males mayores o para alcanzar una meta.
1. Identifica la acción y trátala para describirla con precisión: qué obstáculos o grilletes existen, qué lograrás si superas la situación y qué ocurrirá si no lo haces. Las dificultades y la utilidad.
1. TARDAR UNA SEMANA. TE RECORDAREMOS CADA DÍA QUE TE TOMES UN TIEMPO PARA PENSAR EN ESTO.
a. Todos los días: RECUERDE: Tómese cinco minutos para pensar sobre la situación en su vida que requiere algún tipo de reacción.
b. Escriba en el portafolio:
i. DÍA 1.- Piensa por un momento que en tu vida hay situaciones en las que tienes que enfrentarte a imprevistos y confiar en tu inteligencia actuando con celeridad, y el "no actuar" supone un riesgo.
ii. DÍA 2.- Describe este punto clave en tu vida que tienes que mejorar. ¿A qué te dedicas? ¿Esperas tanto tiempo esperando que alguien te ayude o te oriente? ¿Cuánto tiempo tardas en actuar? ¿El miedo a cometer un error te bloquea?
iii. Día 3.- ¿Qué sientes cuando lo superas?
iv. Día 4.- ¿Cómo te sientes cuando actúas y te enfrentas al problema?
v. Día 5.- ¿Cuál sería el resultado óptimo?
vi. Día 6.- ¿Qué obstáculos retrasan su
intervención?
vii. Día 7.- ¿Qué depende de ti y qué no depende de ti? ¿Cómo podría neutralizar esos obstáculos o frenos?
Diariamente sobre la tarea a realizar cada día.
Cada día escriba un "punto" si ha hecho lo que se había planeado el día anterior y proponga la nueva tarea.