Cuando avanzamos hacia una meta siempre podemos encontrar algunos obstáculos. Si somos capaces de enfrentarnos a ellos uno por uno, mejoraremos nuestra confianza en nosotros mismos y cada vez superaremos barreras más altas. El avance también tiene que motivarnos e inspirarnos a nosotros mismos, así como tomar conciencia de que podemos apoyarnos en nuestras fortalezas y que somos capaces de obtener mayores logros cada día.
Definir los problemas, minimizar la importancia de los obstáculos y enfrentarlos proactivamente.
Todos los días: RECUERDE: Tómese cinco minutos para pensar en la situación en su vida que quiere enfrentar o confrontar.
DÍA 1.- Escriba 5 obstáculos que compliquen o condicionen su intervención.
DÍA 2.- Escribir 5 razones de la urgencia de la intervención para enfrentar la situación.
DÍA 3.- Echa un vistazo a los obstáculos y las razones que escribiste los días anteriores; ¿Qué pasaría si no actúas? ¿Qué pasaría si cometieras un error? ¿Qué riesgo es mayor, el de cometer un error o las implicaciones negativas de la inacción?
DÍA 4.- A partir de las respuestas anteriores compruebe en qué medida actuar con decisión reduce los efectos negativos de la falta de acción y conduce a mejores resultados.
Diariamente sobre la tarea a realizar cada día.
Cada día recibirás una felicitación por lo que se hizo el día anterior y propondrás la nueva tarea.
Todos los días obtienes un punto si realizas estas tareas.